jueves, 3 de marzo de 2011

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Bueno, una cosa nueva en mi vida. Un blog. En primer lugar, me gustaría disculparme por mi torpeza o descuido al llegar a comprender en su totalidad el funcionamiento de esta nueva herramienta en mi vida cotidiana.

Allí estaba yo, en la playa, tocando con las puntas de mis delicados pies la salada mar. Disfrutando de la calidez que reinaba en la orilla, dejando que el sol acariciara mi tenue piel, viendo a mi perrito correr de un lado a otro de la playa. Mi mente libre, y únicamente pendiente del sonido al romper las olas, sensación que me relaja profundamente. De pronto, mientras empleo sólo dos sentidos, el tacto y la audición, con éste último percibo un sonido chirriante, muy molesto. El que hace que progresivamente la playa vaya desapareciendo, al igual que todo el paisaje que había a mi alrededor. De repente me encuentro en mi habitación: son las 7:00 de la mañana, mi despertador, me avisa de la hora de ir a trabajar con mis niños.
JCRoblesPhotography

Se que éste será un despertar de tantos que tendré dentro de unos tantos años. Me encanta la playa, y nada más me gustaría que despertarme en ella.  Por supuesto, mi gran meta en esta vida, es poder lograr ser una gran docente, educar a aquellas personitas inocentes que su futuro en cierta medida depende de su profe, a la que ellos admiran. Mi único deseo, es cumplir el día de mañana mis expectativas como tal.

Felicidad, sí.

1 comentarios:

A las 5 de marzo de 2011, 13:20 , Blogger tina ha dicho...

Estoy convencidíííííssssiiiiiimaaaaaaaaaaaa de que lo conseguirás, y esos niños todavía no saben lo afortunados que serán de tenerte como profe.

Tq.xxx

 

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